
La salvaguardia consiste en ser proactivos para proteger a los niños futbolistas de daños o maltrato mediante las medidas de prevención y respuesta adecuadas y el fomento de su bienestar.
La protección de la infancia es una parte esencial de la salvaguardia y se refiere a las medidas adoptadas en respuesta a una inquietud específica en relación con un niño o niños que pueden estar sufriendo o están en riesgo de sufrir daño o maltrato. Requiere la derivación a servicios especializados de protección de la infancia y a las fuerzas del orden, así como a entidades locales especializadas que estén capacitadas para resolver los posibles casos y gestionarlos, en caso de que haya sospechas sobre el bienestar de un infante, generando responsabilidad para el actor y DIRECTIVOS.